Rafael Cid
El gobierno popular no cesa de hacer populismo aunque públicamente se lo endosa a otros que considera adversarios. El ejecutivo del PP lanza las campanas al vuelo con la especie de una recuperación económica que, afirman, marca tendencia. Para Mariano Rajoy y los suyos los últimos datos en las cifras de empleo son un claro síntoma de que lo peor de la crisis ya ha pasado. Los «brotes verdes» del zapaterismo rampante ¿Recuerdan? Llaman de esta guisa al incremento de contratos basura en periodo estival, concentrados en el sector servicios sobre todo. Mientras, esas mismas estadísticas revelan en profundidad el descenso de actividad en áreas estratégicas (industria, agricultura, investigación, etc.), las que realmente crean riqueza, y no solo la redistribuyen asimétricamente de los pobres a los ricos. Geometría económica variable, por no hablar de la EPA-Trampa que desconoce a los nuevos exiliados económicos, esos centenares de miles de jóvenes, universitarios en su mayoría, que han tenido que emigrar al extranjero por cojones. O que los parados no contabilizados por estar inscritos en insulsos cursos de formación (víctimas propiciatorias de sindicatos desaprensivos) han dejado de pasar por la oficina de empleo. Tampoco el hecho sustantivo del descenso de la población activa. Ya se sabe: grandes mentiras, pequeñas mentiras y estadísticas. Sigue leyendo